Antonio Guerrero Aguilar/
¿Conocen el corrido
de los pavorreales que volaron rumbo a la Sierra Mojada? El municipio de Sierra
Mojada está situado al extremo occidental de Coahuila; fue un enclave minero
que se benefició con la producción argentífera a partir del último tercio del
siglo XIX. Precisamente en ese pueblo se
forjó una leyenda a través de un corrido, cuya autoría se debe a Felipe Valdés
Leal. El corrido se llama Los Pavorreales
pero es más conocido como el de Lucio
Vázquez, a quien asesinaron en una emboscada a causa de un problema de
amores. Para le gente del lugar, Lucio Vázquez existió como lo atestigua su
tumba en el panteón de Sierra Mojada. Sin afán de parecer pretencioso lo estuve
buscando junto con el cronista del lugar, pero no lo hallamos. Aparentemente ese episodio ocurrió entre 1894 y 1896. No
se sabe su lugar de origen, y para los vecinos de aquel puesto trabajaba en
alguna mina.
Y lo mataron por pretender a
una joven guapa y aristócrata, despertando los celos en otro enamorado quien
pagó a unos asesinos a sueldo para que lo despacharan. Existen dos versiones en torno al corrido interpretado por diversos y
variados cantantes; desde Antonio Aguilar, Miguel Aceves Mejía y hasta el
Charro Avitia. La primera estrofa canta:
Volaron los pavorreales, rumbo a la
Sierra Mojada, mataron a Lucio Vázquez, por una mujer que amaba. De acuerdo
a historiadores locales, los mentados Pavorreales
eran una banda de ladrones y gatilleros a sueldo contratados por Juan Sánchez,
quien tenía pendencia con Lucio Vázquez a causa de un triángulo amoroso.
Sierra Mojada fue fundada en mayo de 1879
como consecuencia del descubrimiento de un rico yacimiento de plata
por parte de Néstor Arreola. Al mineral pronto llegaron gambusinos,
mineros, compañías de contratación, comerciantes, políticos y hasta una vía de
ferrocarril que lo unió con Monclova, Coahuila. Se llama Sierra Mojada porque
está en un valle delimitado por una imponente montaña que da la impresión de
estar siempre húmeda, debido a la composición mineral que le da color destacando
en el ambiente desértico que la rodea.
Felipe Valdés Leal da cuenta como Lucio llegó
una noche a su casa:
A las 11 de
la noche estaba Lucio cenando, llegaron unos amigos, para invitarlo a un fandango. Sus padres tuvieron un mal presentimiento: Su madre se lo decía me lo avisa el corazón,
hijo no vayas al baile, cuídate de una traición. Hay otra versión que
cambia la hora de la funesta invitación: fue a las 10 de la noche e incluye el
parecer del padre: Su madre se lo decía,
su padre con mayor razón, hijo no vayas al baile. Como hijo desobediente y
tal vez movido por la posibilidad de ver a su amada, Lucio les contesta: No llores madre querida que me atormenta tu
llanto, voy a bailar con la joven, que sabes que adoro tanto.
La siguiente
estrofa nos habla de que llegaron unos amigos a sonsacarlo sin medir las
consecuencias: Montaron en sus caballos,
rumbo a la Sierra Mojada, donde se hallaba la joven, que Lucio tanto adoraba.
Cuando llegaron al baile Lucio no quiso tomar, uno le invita una copa, otro le
clava un puñal. En otra versión se señala lo siguiente: Cuando llegaron al baile, ya su rival lo
esperaba, le ofrecieron una copa, Lucio no quiso aceptar, se hicieron de
palabras para salirse a pelear.
La falta de una
buena infraestructura en comunicaciones siempre ha estado presente en todo el
desierto de Coahuila que se halla en el Bolsón de Mapimí. Hay carretera de
Sierra Mojada a Torreón y antes se podía llegar en un tren que salía de
Frontera a Cuatro Ciénegas, Ocampo y Sierra Mojada. Incluso se sabe que en el
siglo XIX se introdujeron camellos para usarlos como trasporte de mercancías
entre Cuatro Ciénegas y Camargo, Chihuahua. Hay caminos de terracería que unen
a las principales poblaciones de Sierra Mojada como lo son la cabecera del
mismo nombre, La Esmeralda y Hércules, además de Laguna del Rey perteneciente a
Ocampo, Coahuila.
En la primera
versión, dice que lo apuñalaron mientras se negaba a tomar: Le dieron las puñaladas, de la espalda al
corazón, como le dijo su madre, lo mataron a traición. En la otra
interpretación del corrido precisa que fueron tres puñaladas que cegaron la
vida del intrépido Vázquez a quien: Luego
que ya lo mataron, le echaron boca en la tierra, no es lo mismo ver morir como
cuando uno le toca. La tierra tiene varios y múltiples
sentidos oníricos pues para los intérpretes de los sueños de origen árabe, la
tierra constituye uno de los principales elementos de la vida. Probar un puñado de tierra es disfrutar de
sus productos. Cuando echaron tierra en
la boca de Lucio puede tener varios significados: en primera instancia,
destruir o malograr una cosa. En este caso la vida de Lucio Vázquez. También
cuando alguien echa tierra, lo hace con la intención de ocultar o de disimular
un asunto del que no interesa que se hable.
Con la muerte de Lucio todo se acabó y hay de
aquel que quiera difundir o hablar del asesinato. La tierra en la boca era una
señal como quien dice: ¡la muerte te tocó
porque tú la provocaste! También se
pone tierra de por medio para irse o alejarse de una persona o de un paraje.
Para hacerle mal a alguien se le echa tierra preferentemente negra o de panteón en la entrada de una casa.
Pedimos que la tierra nos trague cuando se siente vergüenza de algún hecho o
para desaparecer de un lugar o de una situación y no enfrentarse a ella sin
dejar señal alguna.
De acuerdo a otra
traslación, Lucio no murió al instante, pues tuvo la esperanza de encomendarse
a la virgen del Tepeyac: Madre mía de
Guadalupe de la villa de Jerez, dame licencia señora, de levantarme otra vez.
Efectivamente en Jerez, Zacatecas hay un templo y una ermita dedicada a la
guadalupana. Tal vez el corrido haga mención a la imagen existente en la ermita
fundada en 1562 por un religioso de nombre Gregorio López quien la construyó en
las márgenes de un río. Gradualmente se
instalaron casas alrededor de la ermita, hasta que cayó una fuerte tromba que la destruyó, por lo que la imagen de la virgen de
Guadalupe fue llevada a Jerez en donde permaneció hasta 1900 en que fue
bendecido el templo donde se encuentra actualmente.
Regularmente se piensa que los pavorreales,
al igual que las gallinas y los gallos no vuelan. No obstante se les puede ver
por encima de los árboles o troncos altos. El autor del corrido es Felipe
Valdés Leal, nacido en Saltillo en 1899, alumno distinguido del Ateneo Fuente, quien
desde muy joven empezó a trabajar para el gobierno de Coahuila y en 1923 se
mudó a Los Ángeles, California para trabajar en una tienda de discos. Allá
compuso su primera canción, Échale un
Quinto al Piano, y luego el corrido de Lucio
Vázquez, también conocido como Los Pavosrreales, el cual se popularizó rápidamente entre los mexicanos, chicanos y
pochos. También es el autor del corrido de Rosita
Alvírez y de muchos éxitos más. En 1943 Felipe Valdés Leal se estableció en
la ciudad de México y en 1947 fue llamado por Discos CBS para dirigir el elenco
artístico. Permaneció ahí durante 25 años. A partir de 1974 residió en
Cuernavaca, Morelos, donde vivió hasta el 17 de agosto de 1988. Gracias a don
Felipe, sabemos que: Volaron los pavorreales, rumbo a la Sierra Mojada,
mataron a Lucio Vázquez, por una mujer que amaba.
Hola Antonio, gracias por compartir la reseña de la canción de Lucio Vázquez,la descripción del lugar de la Sierra Mojada me hizo recordar un viaje que tuve por aquellos rumbos, hace muchos años trabaje para una empresa de venta de maquinas registradoras y me toco realizar la instalación y el entrenamiento del personal de la tienda de supermercado de ubicada en la Laguna del Rey en las instalaciones de la mina de Peñoles,el viaje de ida fue saliendo de Cd. Frontera Coah. en tren con un recorrido aproximado de seis horas hasta las instalaciones del pueblo minero después de una semana de trabajo con ellos el regreso fue en avioneta hasta Torreón Coah. Fue un recorrido muy interesante ver las áreas desérticas y montañosas desde el recorrido en tren y avioneta. Al llegar a Torreón me toco un día 24 de junio día de San Juan lo recuerdo por que era tradición no se si aun sea de darse de cubetazos de agua por las calles todos contra todos!Saludos!!
ResponderBorrarBonito artículo como todos los que escribes. Aprendí mucho de de "Siete Leguas" y de este de "Los Pavorreales". Gracias por realizarlos y compartirlos . Ya sabes que son lectura obligada los domingos (a veces los lunes), Saludos y bendiciones.
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